Mariana González se encargó de revelarle al mundo uno de los secretos más íntimos de su prometido Vicente Fernández Jr. que le ha dado mucha satisfacción.
Mariana González y Vicente Fernández Jr. conforman una de las parejas más sonadas del espectáculo en México. Tras algunos años de noviazgo, finalmente el cantante le dio el anillo de compromiso a su pareja.
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Ante medios de comunicación, ambos contaron cómo fue la romántica pedida de mano en Paris. Dijeron que el propósito de ese viaje era festejar el cumpleaños de la llamada Kim Kardashian mexicana. Entonces, para complementar el festejo, el hijo del Charro de Huentitán le dio el anillo.
Como era de esperarse, las críticas y la polémica en redes sociales no se hizo esperar. Sin embargo, una declaración de la modelo a través del programa Rica, Famosa, Latina hizo que hubiera un vuelco en la historia.
Mariana González revela secreto sexual de Vicente Fernández Jr.
Sin rodeos, Mariana González aseguró que Vicente Fernández Jr. tenía un implante en el pene. Es decir, al parecer Vicente tendría la famosa “bombita sexual” que puso muy de moda el actor Andrés García a finales de los 90.
“Yo estoy muy orgullosa de mi Vis porque cada vez que va al baño saca a bañarse el camello”, contó Mariana.
Sin embargo, la famosa aseguró que a sus 58 años aún le funciona muy bien. Por lo tanto, no ha tenido ningún tipo de problema en la intimidad. Así que es muy feliz a su lado.
“Pues todavía le funciona. Ahí tiene la bombita. Se aprietan un huevito y (se levanta). Es cuando ya no se les para y ya no están comprando como pastillas y todo eso”.
Tras la íntima declaración, Vicente Fernández Jr. no ha dado ninguna declaración al respecto. Tampoco ha confirmado o negado que tenga un implante peneano. Pero seguramente en los siguientes días el cantante dirá algo.
¿Cómo funciona la bombita de Vicente Fernández Jr.?
La famosa “bombita sexual” que utilizan Andrés García y Vicente Fernández Jr. es una prótesis que mejora la intimidad. Se trata de un implante que va colocado dentro del cuerpo cavernoso del pene. El aparato produce una erección artificial a deseo de la persona que lo utiliza.
De acuerdo con los médicos, la prótesis puede durar hasta 15 años. Después de ese tiempo deberá reemplazarse por una nueva para que siga funcionando de manera adecuada.
Durante la operación, se hace una incisión entre el escroto y el pene, a través de la cual se inserta la prótesis. El procedimiento dura alrededor de una hora y media o dos horas y se realiza bajo anestesia general o raquídea. La convalecencia en el hospital será de dos días.
Por último, la cirugía deja una pequeña cicatriz en la base del pene, que es casi invisible. Se puede reanudar la actividad sexual alrededor de un mes y medio después de la operación.
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